Uno de los derechos fundamentales de cualquier trabajador es recibir puntualmente el salario acordado por su trabajo. Sin embargo, no es raro encontrar situaciones en las que las empresas incumplen con este deber, dejando a sus empleados sin cobrar lo que les corresponde. Ante esta situación, el trabajador tiene la opción de reclamar los salarios impagados a través de un procedimiento específico. En este artículo, explicaremos cómo puedes reclamar esas cantidades y qué pasos debes seguir para garantizar que se respeten tus derechos laborales.
¿Qué se entiende por salarios impagados?
Los salarios impagados son aquellas cantidades que el empleador no ha abonado al trabajador en el plazo acordado. El salario es la retribución que el trabajador recibe a cambio de su labor, y está regulado en el artículo 26 del Estatuto de los Trabajadores (ET). Comprende tanto el salario base como los complementos salariales que hayan sido pactados en convenio colectivo o en el contrato individual. El marco normativo que protege el derecho del trabajador a percibir su salario se encuentra en el artículo 29 del ET, que establece la obligación del empresario de abonar el salario en las fechas pactadas.
El impago de cualquier parte de este salario, ya sea en su totalidad o parcialmente, es un incumplimiento por parte del empleador, lo que habilita al trabajador para reclamar dichas cantidades.
El impago de salarios puede incluir, entre otros, los siguientes conceptos:
- Retribuciones básicas o complementarias.
- Pagas extraordinarias.
- Horas extras no remuneradas.
- Comisiones o incentivos acordados.
Es importante tener en cuenta que el trabajador tiene un plazo de un año para reclamar las cantidades adeudadas desde el momento en que debieron ser abonadas, conforme al artículo 59 del ET.
Por lo tanto, si un trabajador no recibe su salario a tiempo, puede iniciar un procedimiento de reclamación dentro de este plazo legal para exigir el pago.
Procedimiento para reclamar salarios impagados
1.Reclamación extrajudicial: la vía amistosa
El primer paso recomendado es tratar de solucionar el problema de manera amistosa con la empresa. Para ello, el trabajador puede enviar una carta de reclamación de cantidades o requerimiento al empleador, donde exponga las sumas adeudadas y solicite su pago. Es importante que esta comunicación se realice por escrito, ya que servirá como prueba en caso de tener que iniciar acciones legales.
Este escrito debe incluir los siguientes elementos:
- Identificación del trabajador y de la empresa.
- El desglose de los salarios pendientes.
- Las fechas en que debieron ser abonados.
- Reclamación formal del pago, con un plazo razonable para que la empresa regularice la situación.
Si el empresario acepta y realiza el pago, se evitará la necesidad de acudir a los tribunales. En cualquier caso, es importante conservar una copia de este escrito, ya que puede ser útil en caso de que sea necesario iniciar acciones legales.
2. Presentación de la papeleta de conciliación
Si el intento amistoso no da resultado, el siguiente paso es la presentación de una papeleta de conciliación ante el Servicio de Mediación, Arbitraje y Conciliación (SMAC). Este trámite es obligatorio antes de acudir a los tribunales, y su finalidad es intentar llegar a un acuerdo sin necesidad de juicio.
La papeleta debe incluir:
- La identificación del trabajador y la empresa.
- La descripción de los hechos que motivan la reclamación.
- Las cantidades adeudadas.
El acto de conciliación será convocado por el SMAC, y durante la reunión se intentará alcanzar un acuerdo entre el trabajador y la empresa. Si se llega a un entendimiento, se firmará un acuerdo y el proceso terminará. De no ser así, se levantará un acta que permitirá continuar con el siguiente paso.
3. Presentación de demanda ante el Juzgado de lo Social
Si no se logra un acuerdo en la fase de conciliación, el trabajador podrá interponer una demanda ante el Juzgado de lo Social correspondiente.
En la demanda, se debe especificar:
- El detalle de las cantidades reclamadas.
- La fecha en que se debieron haber pagado.
- Los documentos que acrediten la relación laboral y la deuda (contrato, nóminas, convenio colectivo, etc.).
Si el juez falla a favor del trabajador, la sentencia obligará a la empresa a abonar las cantidades debidas junto con los intereses de mora (o intereses por el retraso en el pago), que están estipulados en el artículo 29 del ET. Estos intereses son del 10% anual sobre el importe adeudado.
4. Ejecución de la sentencia
Si la empresa no paga voluntariamente tras la sentencia, el trabajador podrá solicitar la ejecución de la sentencia, lo que significa que el juez podrá ordenar medidas como el embargo de bienes de la empresa para saldar la deuda.
¿Qué sucede si la empresa está en concurso de acreedores?
En caso de que la empresa se declare insolvente o esté en proceso de concurso de acreedores, el trabajador puede recurrir al Fondo de Garantía Salarial (FOGASA). Este organismo garantiza el pago de parte de los salarios adeudados cuando la empresa no puede hacer frente a sus obligaciones. No obstante, FOGASA solo cubre hasta el doble del salario mínimo interprofesional por un máximo de 120 días de trabajo.
Recomendaciones al trabajador
Si un trabajador se enfrenta a una situación de impago, es esencial actuar rápidamente para evitar que los plazos legales expiren. Además, es importante contar con asesoramiento jurídico para asegurarse de que el procedimiento se lleva a cabo correctamente.
Mantener un registro exhaustivo de todos los documentos y comunicaciones con la empresa, como contratos, nóminas o correos electrónicos, puede ser de gran utilidad a la hora de presentar pruebas ante los tribunales.
En conclusión, la reclamación de cantidades por salarios impagados es un derecho fundamental del trabajador y está protegido por la legislación española. Aunque el proceso puede resultar complejo, los mecanismos legales como la conciliación y la demanda judicial permiten al trabajador exigir lo que le corresponde. Además, si la empresa se declara insolvente, el trabajador cuenta con la protección del Fondo de Garantía Salarial.
Es esencial actuar con rapidez y estar bien asesorado para asegurar que se protegen los derechos y se recuperan las cantidades adeudadas.