Prevención de Riesgos Laborales: Obligaciones de la empresa y derechos del trabajador

La prevención de riesgos laborales es un pilar fundamental en el ámbito del derecho laboral en España. Garantizar la seguridad y la salud de los trabajadores es una obligación legal que recae principalmente sobre las empresas, pero también implica un conjunto de derechos y responsabilidades para los propios empleados. En este artículo, explicaremos las obligaciones de la empresa y los derechos de los trabajadores en relación con la prevención de riesgos laborales.

1.¿Qué es la prevención de riesgos laborales?

La prevención de riesgos laborales consiste en un conjunto de medidas adoptadas por las empresas con el objetivo de evitar o minimizar los riesgos asociados a la actividad laboral que puedan afectar a la salud física o psicológica de los trabajadores. Se trata de un enfoque integral que abarca desde la evaluación de los posibles peligros hasta la formación de los empleados en medidas de seguridad.

La normativa que regula esta materia en España es la Ley 31/1995, de 8 de noviembre, de Prevención de Riesgos Laborales (LPRL), que establece el marco general de actuación para garantizar unas condiciones de trabajo seguras y saludables. Esta ley se complementa con el Reglamento de los Servicios de Prevención (Real Decreto 39/1997) y otras normativas sectoriales que abordan riesgos específicos en determinados ámbitos profesionales.

2. Obligaciones de la empresa en materia de prevención de riesgos laborales

Las empresas son responsables de asegurar que el entorno de trabajo sea seguro y que se implementen las medidas adecuadas para prevenir riesgos. Según el artículo 14 de la LPRL, el empresario tiene el deber de protección de los trabajadores frente a los riesgos laborales, lo que implica una serie de obligaciones claras, en las que se incluyen las siguientes:

  • Evaluación de riesgos

Una de las principales obligaciones de la empresa es realizar una evaluación de riesgos en el lugar de trabajo. Esta evaluación consiste en identificar los peligros específicos a los que pueden estar expuestos los trabajadores en el desempeño de sus funciones. Los riesgos pueden variar según el sector y la actividad de la empresa, desde la exposición a productos tóxicos hasta el uso de maquinaria peligrosa.

El empresario debe asegurarse de que la evaluación sea adecuada y actualizada periódicamente, teniendo en cuenta cualquier cambio en las condiciones laborales que pueda afectar a la seguridad de los trabajadores. A partir de esta evaluación, se deben definir medidas de prevención concretas para evitar los riesgos identificados.

  • Planificación de la actividad preventiva 

Una vez realizada la evaluación de riesgos, la empresa debe implementar un plan de prevención de riesgos laborales. Este plan debe incluir las medidas de seguridad necesarias para eliminar o reducir los riesgos detectados, la asignación de los recursos adecuados y la determinación de quién será el responsable de llevar a cabo las acciones preventivas.

El artículo 16 de la LPRL establece que este plan debe abarcar tanto la prevención de riesgos generales como los específicos de cada puesto de trabajo, con medidas como la implementación de equipos de protección individual (EPI), la mejora de las condiciones ergonómicas o la instalación de sistemas de seguridad en maquinaria.

En este sentido, cuando los riesgos no pueden ser eliminados o minimizados suficientemente mediante otras medidas, el empresario debe proporcionar a los trabajadores EPI adecuados. Estos equipos, como cascos, gafas de seguridad o guantes, deben ser facilitados de forma gratuita y mantenidos en buen estado. El uso de los EPI es obligatorio para los trabajadores cuando la situación lo requiera, y es responsabilidad de la empresa supervisar su correcta utilización.

  • Información y formación de los trabajadores 

El empresario está obligado a proporcionar a los trabajadores información clara sobre los riesgos presentes en su puesto de trabajo, así como sobre las medidas de seguridad que deben seguir, tal como lo señala el artículo 18 de la LPRL. Esto incluye tanto los riesgos generales de la empresa como los específicos de cada actividad o tarea que realice el empleado.

Además, según el artículo 19 de la LPRL, la formación en materia de prevención es también un derecho de los trabajadores y una obligación de la empresa. El empresario debe garantizar que los empleados reciban una formación teórica y práctica suficiente y adecuada sobre los riesgos inherentes a sus puestos de trabajo, asegurándose de que esta formación sea actualizada cuando se produzcan cambios en las tareas o herramientas utilizadas.

  • Medidas de emergencia

Toda empresa debe contar con un plan de emergencia que detalle las medidas a adoptar en caso de accidentes, incendios u otras situaciones de riesgo inminente. Este plan debe incluir procedimientos para la evacuación de los trabajadores, la identificación de responsables de la gestión de emergencias y la provisión del material adecuado y necesario.

  • Vigilancia de la salud

El empresario tiene la obligación de garantizar la vigilancia periódica de la salud de los trabajadores en relación con los riesgos inherentes a su puesto. Esto incluye la realización de exámenes médicos y otras pruebas de salud, siempre que estas estén relacionadas con los riesgos del trabajo y cuenten con el consentimiento del propio trabajador, tal como establece el artículo 22 de la LPRL.

En sectores o actividades donde exista un riesgo elevado para la salud, como la manipulación de sustancias tóxicas, esta vigilancia es especialmente importante y puede implicar la realización de controles médicos más frecuentes y específicos.

3. Cooperación y coordinación de actividades empresariales

Si varias empresas comparten el mismo espacio de trabajo, están obligadas a coordinarse para garantizar que la prevención de riesgos laborales se aplique de forma coherente y eficaz. Esta coordinación debe incluir la puesta en común de los planes de prevención y medidas adoptadas para proteger a todos los trabajadores presentes en ese lugar.Derechos del trabajador en materia de prevención de riesgos laborales

Además de las obligaciones que la empresa debe cumplir, los trabajadores tienen una serie de derechos fundamentales en el ámbito de la prevención de riesgos laborales. Estos derechos están garantizados por la LPRL y son esenciales para asegurar que los empleados puedan desarrollar su actividad en condiciones de seguridad. 

  • Derecho a una protección eficaz

El derecho a la seguridad y salud en el trabajo es el principal derecho del trabajador en esta materia. Los empleados tienen derecho a que se adopten todas las medidas necesarias para que su entorno de trabajo sea seguro y que no existan riesgos innecesarios que puedan afectar a su bienestar. Esto incluye la implantación de medidas preventivas adecuadas y el acceso a EPI si es necesario. 

  • Derecho a la formación en prevención

Como se mencionaba anteriormente, los trabajadores tienen derecho a recibir la formación adecuada en materia de prevención de riesgos laborales, adaptada a su puesto de trabajo. Esta formación debe ser continua y adecuada a los posibles cambios en el entorno laboral. Debe realizarse, siempre que sea posible, dentro de la jornada laboral y sin coste para el empleado, tal como se establece en el artículo 19 de la LPRL.

  • Derecho a la información

El trabajador tiene derecho a estar informado de todos los riesgos que puedan existir en su puesto de trabajo, así como de las medidas de protección adoptadas por la empresa. Además, el trabajador debe conocer los procedimientos de actuación en caso de emergencia o accidente.

  • Derecho a la participación

Los trabajadores tienen derecho a participar activamente en la prevención de riesgos laborales. Este derecho puede ejercerse a través de los delegados de prevención y el comité de seguridad y salud, órganos que deben estar presentes en las empresas con un determinado número de empleados. Estos delegados y comités tienen el deber de colaborar con la empresa para mejorar las condiciones de seguridad.

  • Derecho a la vigilancia de la salud

Como parte de su derecho a la salud, los trabajadores pueden someterse a exámenes médicos periódicos para detectar cualquier posible enfermedad o riesgo relacionado con el trabajo. Esta vigilancia debe ser confidencial y siempre voluntaria, salvo en aquellos casos en los que la vigilancia sea esencial para garantizar la seguridad colectiva o cuando esté legalmente establecido.

  • Derecho a interrumpir su actividad en caso de riesgo grave e inminente

El artículo 21 de la LPRL establece que los trabajadores tienen derecho a interrumpir su actividad y abandonar el lugar de trabajo en caso de que exista un riesgo grave e inminente para su vida, salud o seguridad. En estas situaciones, el empleado no podrá ser sancionado por detener su actividad si el riesgo es real.

  • Derecho a una indemnización en caso de accidente

Si un trabajador sufre un accidente laboral debido a la falta de medidas preventivas por parte de la empresa, tiene derecho a una indemnización. 

En conclusión, la prevención de riesgos laborales no solo es una obligación legal para las empresas, sino también un derecho fundamental de los trabajadores. Garantizar un entorno de trabajo seguro es crucial para la protección de la salud física y mental de los empleados. Las empresas deben cumplir con una serie de obligaciones, como la evaluación de riesgos, la implementación de medidas preventivas y la formación continua. Por su parte, los trabajadores tienen derechos esenciales, como el acceso a formación, información, vigilancia de la salud, y el derecho a interrumpir su actividad en caso de peligro grave. El cumplimiento riguroso de estas medidas no solo protege a los empleados, sino que también contribuye a crear un entorno laboral más productivo y seguro para todos.